Lunes, 14 Julio 1997
Jul14

Angel Aceves Saucedo y José Luis Flores Hernández... las sumas y restas de las elecciones

Como toda contienda electoral, la del domingo 6 de julio ofrece varias lecturas, desde distintos planos y enfoques. A sabiendas del interés que existe por conocer cuál podría ser el futuro político de nuestro gobernador, tras los cómputos finales de la jornada de hace ocho días, y los efectos que tales resultados tendrán de cara a los comicios locales de 1998, dejó aquí las siguientes reflexiones:

 

1.- El factor Bartlett. Para ningún observador político puede pasar desapercibido el hecho de que el gobernador de Puebla es una figura política nacional. No en balde es considerado por no pocos analistas como líder del llamado sindicato de gobernadores, grupo que en las elecciones del 6 de julio fue de los que mejores resultados entregó al PRI y al presidente Ernesto Zedillo.

Bartlett Díaz, por ejemplo, ganó 15 de 15 distritos; el tabasqueño Roberto Madrazo Pintado 6 de 6; el oaxaqueño Diódoro Carrasco Altamirano 11 de 11; el veracruzano Patricio Chirinos Calero 20 de 23; el tamaulipeco Manuel Cavazos Lerma 7 de 8, y el hidalguense Jesús Murillo Karam 6 de 7.

Esta situación ha provocado que el gobernador de Puebla sea considerado, junto con Roberto Madrazo y Jesús Murillo, como uno de los virtuales sustitutos de Humberto Roque Villanueva en la dirigencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.

En lo personal, no creo que Bartlett vaya por lo pronto a pedir licencia para ser llamado a encabezar el tricolor o incorporarse al gabinete zedillista, sin embargo no lo descarto, como tampoco el hecho de que una gente estrechamente vinculada a él, como el secretario de Agricultura, Francisco Labastida Ochoa, pueda ser de los elegidos para ir a despachar al PRI o a la Secretaría de Gobernación, en lugar de Emilio Chuayffet Chemor.

Zedillo ha ganado nacional e internacionalmente prestigio como demócrata con los resultados de las elecciones del 6 de julio, el reconocimiento de la victoria de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y su disposición de colaboración con el nuevo jefe de gobierno del Distrito Federal.

No dudo que el arribo de un hombre como Manuel Bartlett a la presidencia del PRI sería bienvenido por la militancia priísta y algunos grupos de poder al interior del sistema, pero el mensaje que el presidente Zedillo enviaría a la oposición y al exterior con su designación sería sin duda negativo.

Imagínense, por ejemplo, qué diría la prensa internacional que hoy alaba al presidente Zedillo con la llegada de Bartlett al PRI, siendo que el gobernador poblano pasa como el principal responsable del llamado fraude patriótico en las elecciones de 1988 cuando el sistema de cayó; cuál sería la reacción de algunas autoridades y agencias norteamericanas dedicadas al combate al narcotráfico; o la reacción de políticos como Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Felipe Calderón Hinojosa y Diego Fernández de Cevallos que mantienen con el ex secretario de Gobernación un enconado conflicto.

 

2.- Las tendencias electorales. Si bien el PRI ganó los quince distritos electorales de la entidad, ello no quiere decir que tal comportamiento vaya a repetirse en los comicios de noviembre de 1998, donde los poblanos elegiremos gobernador, presidentes municipales y diputados al Congreso del estado.

Son varios los datos que nos indican que las cifras del 6 de julio deben ser analizadas con cautela, para no caer en la tentación de afirmar que Puebla el PRI tiene asegurado su futuro inmediato.

Para empezar, hay que destacar que a pesar de las buenas cuentas entregadas por el PRI de aquí, sus índices de votación continuán a la baja. De los 806,991 sufragios que captó en 1994, en 1997 obtuvo 611,227, es decir casi 200 mil votos menos.

Otro elemento significativo que debe tomarse en cuenta es que al PRI siempre le va mejor en elecciones federales que en estatales, pues mientras en las primeras incluso ha rebasado la cifra de 800,000 votos como ocurrió en 1994, en las locales nunca ha llegado a 600,000.

Este fenómeno opera en sentido contrario con el PAN, que regularmente entrega mejores cuentas en comicios locales que en elecciones federales. Quizá el mejor ejemplo de ello sean los comicios de noviembre de 1995, en donde captó 430,345 votos contra 579,741 del PRI.

En el caso del PRD, hay que anotar que a este partido le sucede algo similar que al PRI en las elecciones: que en las federales sube y en las estatales baja.

 

3.- La sucesión gubernamental de 1998. Si algo modificaron los resultados de la jornada electoral del 6 de julio, es el escenario de la sucesión de Manuel Bartlett. Las condiciones que priístas y panistas tenían antes de los comicios, hoy son evidentemente distintas para unos y otros.

Por el lado del PRI nadie puede negar que la fortaleza política del gobernador Manuel Bartlett jugará en pro y en contra de algunos precandidatos a sucederlo. Entre los primeros puede usted incluir al diputado electo por Teziutlán, José Luis Flores Hernández y entre los segundos al también diputado por la vía plurinominal, Angel Aceves Saucedo.

Asimismo, me parece que los favorables resultados obtenidos por la dirigencia estatal del tricolor abren el abanico de la sucesión a otros precandidatos, que hasta ahora no habían sido considerados como futuros inquilinos de Casa Puebla. En concreto, me refiero al presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Mario Marín Torres, a quien nadie puede regatearle méritos y relaciones para aspirar a sustituir a su jefe.

Por el lado del PAN, las secuelas de la derrota electoral no tardarán en sentirse, con los cambios que vienen en el Comité Directivo Municipal, el Consejo Estatal y el Comité Directivo Estatal.

La debacle panista no sólo afectó los planes futuristas de la lideresa estatal del PAN, Ana Teresa Aranda de Orea, sino que dejó en la horfandad y sin plataforma política desde la cual proyectarse, para aspirar a la gubernatura, a gentes como Jorge Ocejo Moreno y Humberto Aguilar Coronado, que no estarán en el Congreso de la Unión.

Otros que tampoco pueden sustraerse de los efectos negativos de la derrota son el senador Fernando Herrero Arandia y el alcalde Gabriel Hinojosa Rivero, el primero porque perdió las elecciones en su distrito y el segundo porque perdió los cuatro distritos de la capital.

En estas circunstancias, no debe descartarse que en los 16 meses que restan a los comicios locales, Acción Nacional sufra una profunda reestructuración interna de la que surjan nuevas caras y dirigentes, entre ellos el candidato que los represente a la gubernatura en noviembre de 1998. Entre éstos no me parece exagerado afirmar que podríamos ver a empresarios como Antonio Sánchez Díaz de Rivera, Luis Paredes Moctezuma o Carlos Solana Pumarino.

En suma, creo que el escenario electoral de 1998, donde el principal puesto en disputa será la gubernatura del estado, tendrá nuevos actores y protagonistas. Por parte del PRI, a Mario Marín y por parte del PAN a dirigentes y ex dirigentes del sector privado de Puebla como los arriba mencionados.

 

EN CORTO

            Para sustituir a Angel Alonso Díaz Caneja en la presidencia del Comité Directivo Municipal del PAN, cuya asamblea se efectuará entre los meses de octubre y noviembre, anote los nombres del secretario general Fernando López Rojas, del ex presidente de la Cámara de Comercio, Ramón Mantilla González de la Llave y del secretario de Organización del Comité Directivo Estatal, Eduardo Rivera Pérez. ***** En el transcurso de los próximos días el alcalde Gabriel Hinojosa anunciará una nueva reestructuración en el ayuntamiento de Puebla, que provocará la salida de por lo menos tres funcionarios de primer nivel de la administración municipal. ****** A propósito del alcalde y el PAN, me informan que el cuñado de Hinojosa, el regidor Julio Moctezuma Yano, será objeto de una sanción estatutaria por parte de la Comisión de Orden del blanquiazul en una o tres semanas más, por haber intentado cometer fraude en la convención electoral panista del distrito 06 de esta ciudad, que finalmente postuló como candidato a Carlos Paz Villalba Vivaldo, con los resultados que ya todos conocemos. ***** El Consejo Nacional de Comercio Exterior (Conacext) región sur, tiene nueva gerente desde la semana pasada en la persona de María de la Paz Caso Alvarez, quien sustituyó en el cargo a Mónica Morán Maese. ***** Donde también hubo cambios fue en el Centro Empresarial de Puebla, donde Mónica Ruiz se despidió de la Subdirección de Eventos y Sandra Hoyos Santecomani del puesto de asistente de la presidencia y la dirección general del sindicato patronal. Los malpensados aseguran que con dichos cambios se abatirán al máximo las fugas de información de lo que ocurre en las oficinas de la Coparmex-Puebla. ¿Será? ***** Como cada año, el diputado electo Angel Aceves Saucedo estuvo hace unas semanas en la clínica de San Antonio Cacalotepec, para desintoxicarse y reducir algunos de los muchos kilos que tiene de más. Cuentan que en esta ocasión el tratamiento no sólo le mejoró el humor, sino que le hizo bajar algo así como 12 kilogramos. ***** Será a finales de julio cuando el nuevo presidente nacional del Consejo Coordinador Empresarial, Eduardo Bours Castelo, visite Puebla y se reúna con los socios y directivos de las principales cámaras y organismos empresariales del estado de Puebla, luego de la invitación que en este sentido le hicieran el jueves pasado José Manuel Rodoreda Artasánchez, Pablo Rodríguez Posada, José Yitani Maccise, Luis Paredes Moctezuma, Alfredo Cabañas Munguía y Manuel Gancedo del Río, en su despacho de la Ciudad de México. ***** El viernes pasado se comunicó con nosotros el director de Contraloría de la oficina matriz de la casa de bolsa Valores Mexicanos, Juan Carlos González Orozco, para hacernos saber que efectivamente su anterior director en Puebla, José Luis Acosta, había defraudado a la institución, por lo que ésta había procedido legalmente contra él y dado aviso del desvío a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. De paso también nos aclaró que Valores Mexicanos no ha recibido ninguna demanda por parte de los inversionistas víctimas del abuso de confianza de Pepe Acosta y que la casa de bolsa ya resarció a los afectados el daño causado a su patrimonio. Sin embargo, la misma fuente nos aclaró que existen otras pérdidas a las que Valores Mexicanos no puede responder, ya que fueron producto de un acuerdo particular entre los inversionistas y el ex director en Puebla de dicha casa de bolsa. ***** Y hasta la próxima.