Lunes, 11 Diciembre 2000
Dic11

La metamorfosis en el IEEP: de mapaches a zorillos

¿Qué razones tiene el PRI -y en concreto su representante José Alarcón Hernández- para asumir la defensa de los directores del Instituto Electoral del Estado de Puebla (IEEP) impugnados por el PAN? ¿Quién en realidad puso al PAN en antecedentes sobre la militancia panista de Iván Rodríguez Franco y el pasado priísta de José Joaquín Rivera Ramírez y Víctor Manuel Bravo Polaco?

Hasta ahora, la versiones que sobre los impugnados directores del IEEP se han dejado correr apuntan en dos sentidos con una misma agravante: la venganza.

En el caso del director de Organización Electoral, José Joaquín Rivera, se dice que su renuncia fue motivada por presiones del líder del Congreso del estado, Moisés Carrasco Malpica. La supuesta o real animadversión del profesor Carrasco en contra de quien hasta hace unos días fuera su secretario particular, obedece -según el propio afectado- a un lío de faldas allá por 1984 cuando su ex jefe era funcionario del ayuntamiento de Puebla en la gestión de Jorge Murad Macluf.

El otro caso corresponde a Iván Rodríguez Franco, cuyo nombramiento como director de Administración y Servicio Electoral Profesional fue impugnado por el representante del PAN, Luis Enrique Palacios Martínez, por un hecho que pudiera resultar paradójico: ser militante ¡panista!

Oficiosamente el PRI ha dicho que Rodríguez Franco es víctima de una purga al interior del PAN, promovida por el grupo del senador Francisco Fraile García en contra del de Ana Teresa Aranda, con quien aquél estaría identificado.

En realidad ambas versiones son inexactas, por no decir falsas, pues ignoran tres hechos cruciales que subyacen en el fondo de este conflicto entre el PRI y el PAN por la integración del máximo órgano electoral del estado:

 

1. La añeja rivalidad existente entre el diputado Moisés Carrasco Malpica, líder de la fracción priísta y presidente de la Gran Comisión del Poder Legislativo, y el secretario general del PRI y representante de este partido ante el IEEP, José Alarcón Hernández.

Esta situación no implica que la citada animadversión entre el profesor Moisés Carrasco y su ex colaborador José Joaquín Rivera  carezca de sustento, no. Simplemente significa que el conflicto entre ambos va más allá, pues cuando en 1984 el hoy director de Organización Electoral del IEEP fue despedido por Moisés Carrasco del ayuntamiento de Puebla, éste se fue a trabajar a la Secretaría de Acción Electoral del PRI. ¿Con quién creen? Sí, con él, con José Alarcón. Dato, que por cierto, el flamante abogado José Joaquín Rivera omitió en su curriculum vitae, repartido a los consejeros electorales que aprobaron su nombramiento.

 

2. Las revelaciones acerca de la militancia partidista de los directores de Prerrogativas, Partidos Políticos y Medios de Comunicación, Víctor Manuel Bravo Polaco, y de Administración y Servicio Electoral Profesional, Iván Rodríguez Franco, no fueron resultado de una acuciosa investigación del PAN, sino de una filtración proveniente del PRI.

En efecto, fue un anónimo recibido en las oficinas del Comité Directivo Estatal del PAN el que dio cuenta de la militancia priísta de Bravo Polaco y de su inclusión en la planilla de regidores del PRI por el municipio de Coxcatlán en las elecciones de 1995.

Por lo que hace a Rodríguez Franco, el proceso fue distinto. El anónimo simplemente decía que era panista. Ya el PAN se encargó de ir a sus archivos y localizar su ficha de afiliación.

Sobre este personaje llaman la atención un par de situaciones. La primera es que Rodríguez Franco no sólo ocultó su militancia panista, sino el hecho de trabajar como analista en la Secretaría de Finanzas y Desarrollo Social (SFDS), de la cual fue despedido la semana pasada.

Pero la situación realmente sospechosa es que Rodríguez Franco fue propuesto para la Dirección de Administración y Servicio Electoral Profesional por el director general del IEEP, José Alejandro Romero Carreto, pese a que éste no lo conocía y nunca habló con él.

La única persona que le requirió sus documentos y le anunció que podría ser designado como director del IEEP fue, ¡vaya casualidad!, José Alarcón, con quien el "embozado" panista dice mantener amistosas relaciones.

 

3. El Instituto Electoral del Estado de Puebla no es un órgano autónomo, ni independiente del Poder Ejecutivo y el PRI, sino subordinado al secretario de Gobernación del estado, Carlos Alberto Julián y Nácer, y al secretario general del Comité Directivo Estatal del tricolor, José Alarcón.

Hasta el momento, los medios de comunicación y columnas políticas que se han ocupado del tema de la impugnación del PAN y las renuncias de algunos directores del IEEP han pretendido vender la idea de que el escándalo es producto de un lío de faldas y una purgna al interior del blanquiazul.

En esa línea, algunos medios han puesto el acento en los casos de José Joaquín Rivera e Iván Rodríguez, sobre todo en el primero por la carga de morbo que encierra su affaire con el líder camaral, Moisés Carrasco.

En la entrevista que José Joaquín Rivera concedió al noticiero Puntual el jueves pasado, éste confesó que su renuncia al cargo de director de Organización obedeció a las presiones que recibió de dos personajes. A juzgar por sus declaraciones y la defensa que ese mismo día se hizo sobre su persona en una columna del periódico Cambio, queda claro que uno de estos personajes fue el diputado Moisés Carrasco.

"-Quién le dijo que dimitiera? ¿Moisés Carrasco Malpica?

 -Me lo reservo. Yo recibí textualmente esta comunicación: `He recibido instrucciones de que dimita de su cargo porque le están buscando (los pies) y lo van a acabar'.

 -¿Así le dijeron textualmente: lo van a acabar?

 -Sí. Después un segundo actor político me dijo: `Dimita usted a su cargo porque el Partido Verde Ecologista pide su cabeza'". Hasta aquí la entrevista.

¿Quién es el segundo actor político del que habla José Joaquín Rivera?

Las evidencias apuntan a que este segundo personaje es el mismísimo secretario de Gobernación del estado, Carlos Alberto Julián y Nácer.

Y es que dos días antes de la entrevista que José Joaquín Rivera concedió al noticiero Puntual, el entonces director de Organización del IEEP fue visto en el despacho de Julián y Nácer. Ese martes, Iván Rodríguez también visitó la Secretaría de Gobernación minutos después. Y cuentan que al día siguiente, es decir, el miércoles 6 de diciembre, volvió a reunirse con Julián y Nácer pero para entregarle su renuncia como director de Administración y Servicio Electoral Profesional del IEEP.

Sin embargo, el verdadero poder tras el trono del Instituto Electoral del Estado de Puebla es el secretario general del PRI, José Alarcón.

El, y sólo él, fue quien planeó la integración del IEEP, quien decidió que el PRI debía quedarse con 5 de los 9 consejeros electorales, quien eligió al presidente, al secretario y al director generales, y quien seleccionó también a los cinco directores operativos del organismo.

En la práctica, tanto el presidente del Instituto, Alejandro Arturo Necoechea Gómez (a) "El Zorri", como el director general del organismo, José Alejandro Romero Carreto, no son mas que títeres de José Alarcón.

No en balde antes de cada sesión, los cinco consejeros electorales propuestos por el PRI -Alejandro Necoechea, Germán Molina Carrillo, Manuel Alonso Espinosa, José Félix Urbano Noe Avila y Miguel Flores Muñoz- siempre se reúnen con su pastor dentro o fuera de las instalaciones del Instituto.

Y no en balde los directores de área propuestos por el director general, José Alejandro Romero, no resultaron tan conocidos suyos como sí de José Alarcón, con quien incluso algunos de ellos trabajaron cuando aquél fungió como secretario de Acción Electoral del PRI en el sexenio del gobernador Guillermo Jiménez Morales.

¿Dónde está, pues, la independencia, autonomía e imparcalidad del Instituto Electoral del Estado de Puebla? ¿Qué tienen que hacer con el secretario de Gobernación los directores de área? ¿Por qué Julián y Nácer les pide su renuncia? ¿En calidad de qué? ¿Para qué?

¿A quién en realidad representan los consejeros electorales del IEEP? ¿El vicio de origen con que fueron nombrados por el Congreso del estado marcará su actuación? ¿Serán la segunda versión, corregida y aumentada, de los "Prócoros"? ¿Será que en el IEEP los "mapaches" fueron sustituidos por "zorrilos" electorales?

¿Podemos confiar los poblanos la organización de las elecciones a un funcionario como Alejandro Romero Carreto, quien en su calidad de director general del IEEP propone como directores de área a priístas y panistas embozados? ¿Le pedirá el Consejo General del IEEP cuentas por las responsabilidades en que incurrió al ocultar información y entregar expedientes "rasurados" de los candidatos a directores de área? ¿La notaría pública que el ex gobernador Manuel Bartlett le entregó en Huejotzingo fue en realidad por méritos propios o una recompensa política? ¿Acaso Alejandro Romero Carreto y su alter ego, José Alarcón, creen que los poblanos no tenemos memoria política? ¿Qué ya quedó en el olvido la maniobra del notario y ex magistrado Manuel Romero Beristáin que desató el conflicto postelectoral de 1995 en Huejotzingo?

¿Por qué el PRD se abstuvo de impugnar a los directores de área nombrados por el Consejo General del IEEP, pese a contar con la misma información que el PAN? ¿Será por qué su representante es Javier Amaya Aquino? ¿Será por qué José Alarcón ya encontró en él a un émulo de los celebérrimos "Prócoros"?

Son preguntas. Que conste.

 

EN CORTO

Para el próximo sábado 16 de los corrientes ha sido convocado el Consejo Estatal del PRD para llevar a cabo una sesión extraordinaria, para elegir a un presidente interino y discutir la elección de un nuevo Comité Ejecutivo. La reunión, si es que se celebra, podría desarrollarse en un clima de tensión, debido a que ninguno de los dos grupos que se disputan la presidencia interina cuenta con el apoyo de las dos terceras partes de los consejeros y los enviados del Comité Ejecutivo Nacional -Clemente de Jesús, Isaías Villa y Miguel Contreras- lejos de poner orden han alborotado más la gallera. Por el grupo del diputado federal Luis Miguel Barbosa Huerta los prospectos para quedarse con la presidencia interina son Mario Villar Borja, Rogelio Carvajal Lozano y Servando Galindo Ríos, mientras que Mario Vélez Merino por la corriente Convergencia de Izquierda, en la que participan Jorge Méndez Spínola, Susana Wuotto Cruz, Guillermo Espinoza Martínez y Gerardo Pérez Muñoz. La sede (¿o el ring?) del Consejo Estatal aún está por definirse, toda vez que el salón del hotel donde tradicionalmente se llevan a cabo este tipo de encuentros perredistas está ocupado la mañana y tarde del sábado entrante. ***** El próximo domingo 14 de enero del 2001, la casa de campo de Alberto Jiménez Morales, en el club de golf El Cristo, será sede de un encuentro político familiar en torno al ex gobernador y ex secretario de Pesca, Guillermo Jiménez Morales, quien ya confirmó su asistencia como invitado especial al segundo informe de labores de Melquiades Morales Flores. ***** A propósito de gobernadores. Le paso el tip que el de Veracruz, Miguel Alemán Velasco, anunciará en el transcurso de los próximos días su intención de llegar a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, en sustitución de Dulce María Sauri Riancho, con el apoyo de algunos mandatarios estatales, entre ellos el de Puebla. ***** Quien ya fue ratificado como subsecretario de Comunicaciones en la SCT federal es el poblano Aarón Dychter Poltolarek. ***** La candidatura de Luis Rodríguez Fernández a la presidencia de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) no fue bien recibida por un sector de esta organización, ni por su Consejo Directivo que lo acusó de traidor y de haber intentado destituir, en alianza con el ex secretario de Comercio y Fomento Industrial, Herminio Blanco, a la actual dirigencia de la Concanaco, encabezada por Yamil Hallal Zepeda. La candidatura del ex presidente de la Cámara de Comercio de Puebla es impulsada por la Canaco de San Martín Texmelucan, así como por las cámaras de Monterrey, la Ciudad de México y la Delegación Alvaro Obregón bajo la influencia de Jorge Chapa Salazar y Guillermo Velasco Arzac. De los cinco o seis aspirantes que se registraron para ocupar la presidencia de la Concanaco, el candidato a vencer es Arturo González, de Tijuana, quien cuenta con el apoyo del actual dirigente del organismo. Otro candidato con posibilidades, al que el poblano Luis Rodríguez podría sumársele de última hora, es Alejandro Elizondo, de Guadalajara. ***** No lo diga en voz alta, pero el dictamen del despacho del constitucionalista Ignacio Burgoa Orihuela sobre el conflicto limítrofe entre Puebla y San Andrés Cholula favorece al primer ayuntamiento, de ahí las patadas de ahogado del panista Eliuth Solís Tototzintle. Y aunque el anuncio oficial estaba previsto para el próximo viernes 15, no descarte usted que éste se posponga para después del segundo informe del gobernador Melquiades Morales. ***** Y hasta la próxima.