Marín, el candidato incómodo del PRI

El panorama político del PRI de cara a las elecciones locales del 2004 se vislumbra harto complicado por los dos retos a los que internamente tendrá que enfrentarse, antes de medir fuerzas con el Partido Acción Nacional, al que hoy incluso algunos sondeos ubican en primer lugar en las preferencias electorales.

 

El primer y más difícil reto del PRI será convencerse a sí mismo de que el precandidato que en opinión de la ciudadanía y de sus propios militantes es el más conocido, el de más confianza y con mayor potencial de voto –Mario Marín Torres-, no es el que más le conviene.

 

El segundo reto será construir una candidatura de consenso en torno a quienes hoy, según la creencia generalizada, son los favoritos del principal inquilino de Casa Puebla: el ex secretario de Finanzas y Desarrollo Social, Rafael Moreno Valle, y el senador de la República, Germán Sierra Sánchez.

 

Pero vayamos al análisis.

 

Tracking mensuales en poder de este espacio, realizados por el Centro de Investigaciones sobre Opinión Pública (CISO) de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), revelan que el ex presidente municipal de la capital del estado es el precandidato a la gubernatura mejor posicionado.

 

Las encuestas lo sitúan no sólo como el aspirante por el cual hoy votaría la mayoría de los ciudadanos de la entidad, sino como el único priísta que en intención de voto supera a los panistas Ana Teresa Aranda y Francisco Fraile García ubicados en el ranking en la segunda y tercera posiciones, por arriba de Guillermo Pacheco Pulido, Carlos Alberto Julián y Nacer, Rafael Moreno Valle, Germán Sierra Sánchez y Enrique Doger Guerrero.

 

A la pregunta por qué candidato a gobernador votaría, los tracking mensuales del CISO de marzo a agosto del 2002 reflejan que mientras Mario Marín pasó del 57.9 al 59.1%, Ana Teresa Aranda y Francisco Fraile cayeron del 55.2 al 43.7%, y del 44.9 al 42.9%, respectivamente.

 

Por lo que hace a otros priístas con aspiraciones de llegar a la gubernatura, los tracking de la UAP muestran que casi todos subieron algunos puntos, con excepción del rector Enrique Doger Guerrero, cuya intención de voto cayó de marzo a agosto de 35.0 a 28.7%.

 

Germán Sierra subió de 31.3 a 35.6%; Moreno Valle de 34.5 a 36.1%, y Guillermo Pacheco Pulido de 28.4 a 42.6%, repunte realmente notable, considerando que no sólo fue de 14 puntos, sino –y quizás aquí radique lo más importante- sin estar en abierta campaña política.

 

Pero las encuestas del CISO de la UAP no son las únicas que sitúan a Mario Marín en primer lugar, seguido por Francisco Fraile y Ana Teresa Aranda, y más abajo por otros priístas como Germán Sierra, Rafael Moreno Valle y Guillermo Pacheco Pulido.

 

De acuerdo con un sondeo en los 26 distritos locales de la entidad, levantado entre el 13 de noviembre al 9 de diciembre del 2002, por la firma Centro de Estudios de Opinión JM, cuyo director general es Jesús Medina Rojo, el ex presidente municipal de Puebla encabeza las preferencias tanto en la capital como en el interior del estado.

 

En los seis distritos locales con cabecera en el municipio de Puebla, Marín tiene el 34.5% de la intención de voto, Francisco Fraile el 19.8, Ana Teresa Aranda el 14.6, Germán Sierra el 11, Enrique Doger el 9 y Rafael Moreno Valle el 4%.

 

En los distritos del interior del estado, la situación se repite aunque con algunos matices. Lo que sí no cambia es que Marín está en primer lugar y Francisco Fraile en segundo y Ana Teresa en tercero.

 

Por cuanto hace al PAN y al PRI, la intención de voto en la capital favorece al primero con el 37.1% contra el 29.6% del tricolor. Aunque en los distritos del interior del estado el panorama es distinto debido a que el PRI supera al PAN, en el global prácticamente hay un empate técnico. Los panistas tienen el 31.46% y los priístas el 30.36%

 

Un dato que los sondeos de Rigoberto Benítez y Jesús Medina no registran, lo que hace pensar a propios y extraños que Mario Marín no será el abanderado del tricolor a la gubernatura a pesar de lo que indiquen las encuestas, es que al ex presidente municipal de Puebla le hace falta quizá el voto más importante de cuantos necesita para obtener la nominación priísta, el voto del gobernador Melquiades Morales Flores.

 

Para el común de los ciudadanos no es desconocido el hecho de que Mario Marín se encuentra lejos de su ánimo por las actitudes de insubordinación y deslealtad que le mostró durante su gestión como alcalde Puebla.

 

A estas alturas del sexenio, la única incógnita que persiste sobre Melquiades Morales es por quien de los dos funcionarios que integraron su gabinete se decidirá: por el hoy senador Germán Sierra Sánchez o por el que parece su delfín, Rafael Moreno Valle.

 

Sólo hay que ver la televisión, escuchar la radio o revisar la prensa para darse cuenta que desde el aparato estatal y la estructura de gobierno los apoyos hacia Mario Marín son nulos contra los que a manera de gacetillas, promocionales y entrevistas a modo se multiplican todos los días a favor de Germán Sierra y Moreno Valle, pese que hoy ninguno de ambos es formalmente candidato.

 

EN CORTO

 

Este fin de semana el Partido de la Revolución Democrática, reunido en convención nacional, acordó designar a Rosa María Avilés Nájera como candidata plurinominal por la cuarta circunscripción, ubicándose en el segundo de la lista que comprende a los estados de Hidalgo, Morelos, Puebla, Tlaxcala y el Distrito Federal. ***** No lo cuente en voz alta, pero el secretario particular del rector de la UAP, Javier Casique Zárate, en compañía de su asistente personal, Gabriel López, y del director de Servicios al Estudiante, Sergio Díaz Carranza, se fueron de fin de semana a la Habana, Cuba. Dicen que pasa sacarse las tensiones del último proceso de elección de consejeros universitarios. ***** Y hasta la próxima.