¿Podrá el ex gobernador de Puebla, Manuel Bartlett Díaz, ganar los quince distritos electorales de la entidad, tal como lo anunció aquí en el arranque de su campaña por la nominación del PRI a la Presidencia de la República?

Las evidencias disponibles me indican que no, que difícilmente podrá conseguirlo a partir de dos factores que me parecen fundamentales: la ausencia de una estructura política superior a la de sus contrincantes, y el rechazo que su precandidatura despierta entre los miembros de la clase política local.

En los 90 largos días que aún faltan para las elecciones internas del PRI, no se ve cómo Manuel Bartlett pueda remontar las tendencias nacionales que hoy lo colocan muy por abajo del ex secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, y del gobernador con licencia de Tabasco, Roberto Madrazo Pintado.

Y aunque localmente el panorama electoral para Bartlett no luce tan desolador, la verdad es que el ex gobernador tampoco debe confiarse demasiado y menos después de lo desangelada que resultó su gira proselitista por la entidad la semana pasada.

Una cosa es que los labastidistas poblanos se hayan visto envueltos en polémicas y golpes bajos por el control de la campaña, y otra muy distinta que no estén trabajando en donde realmente deben hacerlo: en el campo electoral.

Con José María Morfín Patraca lejos de Puebla y de la campaña de quien fuera su jefe a su paso por la Secretaría de Gobernación, la Secretaría de Educación Pública y el gobierno del estado, los bartlistas se quedaron sin operadores electorales.

Para muestra un botón: Omar Blancarte Montaño, quien durante el sexenio de Bartlett se desempeñó como segundo de abordo del Chema Morfín, hoy suda la camiseta labastidista.

Una realidad inocultable es que de los tres equipos de campaña con presencia en Puebla, el de Francisco Labastida es el más completo en su estructura electoral, no sólo porque con él se reclutaron los ingenieros electorales más célebres de la comarca como Efraín Trujeque Martínez, Concepción Contreras Bretón o José Alarcón Hernández, sino porque a estas alturas del proceso, es el único que cuenta con coordinadores electorales en los 217 municipios de la entidad.

Otro elemento que me hace pensar que difícilmente Manuel Bartlett ganará los 15 distritos de Puebla, es la falta de identificación que hacia su precandidatura muestran los factores reales de poder en Puebla, como la clase política, el clero, la prensa y el empresariado.

Para empezar, la nomenklatura política priísta que después de seis años volvió al poder con el gobernador Melquiades Morales Flores, no está dispuesta a permitir el retorno de los bartlistas. De ahí su preferencia por Francisco Labastida y, en menor medida, por Roberto Madrazo.

La posición del clero debe ser leída en entrelíneas en la declaración que el arzobispo Rosendo Huesca Pacheco hizo a El Sol de Puebla el jueves pasado, después de reunirse en privado con Manuel Bartlett. Ahí, deslindándose de cualquier compromiso político con el ex gobernador, Rosendo Huesca aclaró: "Yo no voto, ni consigo votos".

La postura de los medios de comunicación y el sector empresarial es también conocida. La verdad es que los únicos que hoy se desgarran las vestiduras públicamente por el ex gobernador fueron los beneficiados por la obra pública, los contratos de publicidad y los embutes repartidos por Raúl Torres Salmerón en su calidad de director de Comunicación Social.

Pero el estancamiento de la precandidatura de Bartlett entre la población en general y en particular entre los militantes y simpatizantes del tricolor, radica en su pérdida de credibilidad.

Sí, el talón de Aquiles de Manuel Bartlett, más allá de su doble discurso y biografía política, radica en la suspicacia de su actuación en el proceso interno del PRI, ahora que la contienda se ha centrado entre Roberto Madrazo y Francisco Labastida.

Y es que Bartlett más que un actor de peso en la disputa por la nominación priísta, empieza a percibirse como un patiño del sistema o -para usar sus propias palabras- como una especie de "payaso de las cachetadas" del PRI, que al final de la jornada intentará sacar provecho personal de la situación.

Ojalá me equivoque, pero insisto: Bartlett más que a la Presidencia, le apuesta a su supervivencia política en el próximo sexenio.

Y París está a la vuelta de la esquina.

 

EN CORTO

            La visita del ex gobernador de Guanajuato y virtual candidato panista a la Presidencia de la República, Vicente Fox Quesada, dejó ver ayer las pugnas al interior del PAN por la candidatura al Senado de la República entre Ana Teresa Aranda de Orea y Francisco Fraile García, así como entre los Amigos de Fox que coordina Gabriel Hinojosa Rivero y el Comité Directivo Estatal a cargo de Angel Alonso Díaz Caneja. A este último, por cierto, no lo dejaron sentarse en el presidium que los Amigos de Fox montaron en el Gran Salón del Fiesta Inn durante la comida que ahí sostuvo el ex gobernador de Guanajuato con líderes sociales, entre los que destacaron los empresarios Pablo Rodríguez Posada, Enrique Morodo y Francisco Emmelhainz Naveda, así como los neoperredistas José Manuel Pérez Vega (a) "Pepe Momoxpan" y Ricardo Villa Escalera. ***** Uno que puso la nota de color en el mitin encabezado por Vicente Fox en el Salón Viva's fue el coordinador de campaña de Ana Teresa Aranda, José María Iguiniz. Y es que el caballero de Colón hizo escarnio del presidente y secretario general del PAN en Puebla con una foto en la que aparecen retratados con el ex gobernador de Guanajuato. "Dimas y Gestas con Fox". ***** Los que también han entrado localmente en una disputa por usufructar el nombre del todavía jefe de gobierno del Distrito Federal como eventual candidato a la Presidencia de la República, son los perredistas poblanos. Las pugnas internas han alcanzado tal nivel que, de plano, el coordinador nacional de los comités de apoyo a Cuauhtémoc Cárdenas, Pedro Ettiene, es de la idea que la coordinación estatal recaiga en una persona de fuera de la entidad. Entre los perredistas locales que se han apuntado para encabezar en Puebla la campaña proselitista de Cuauhtémoc Cárdenas, quien por cierto estará aquí el próximo sábado 21 de agosto, figuran Luis Miguel Barbosa Huerta, Mario Vélez Merino, el diputado Horacio Gaspar Lima, Norberto Amaya Aquino y Rogelio Carvajal Lozano. ***** Aunque la coalición PAN-PRD para las elecciones del 2000 todavía está en veremos, el panista Luis Enrique Palacios Martínez ya se anotó para ser él quien represente a ambos partidos ante el Consejo Local del Instituto Federal Electoral. Y si bien el secretario de Acción Electoral del PAN se está viendo muy adelantado, quizá sea lo mejor, a juzgar por las peleas al interior del PRD, donde la representación ante esa instancia electoral, actualmente a cargo de Gerardo Pérez Muñoz, se la pelean con malas artes Luis Ortega Morales, Alejandro López Bravo, Hugo Aguilar Díaz y Alejandro Camarillo Beristáin. ***** Otros que andan entusiasmados con el proyecto de la coalición opositora son los uapachosos Luis Enrique Sánchez Fernández, acotado director de Radio UAP, y Nicéforo Rodríguez Gaytán, secretario particular de Guillermo Nares Rodríguez. Ambos pretenderían convertirse en candidatos a diputados federales de la "sociedad civil". ***** Este fin de semana tomó posesión como presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Amalia García Medina, ante los miembros del Consejo Nacional perredista, entre los que figuran tres poblanos: la ex diputada Rosa Márquez Cabrera, la regidora Cristina Amaya Aquino y el ex priísta José Luis Cesatti Hernández. Este último por cierto tuvo la puntada de competir en las elecciones internas del PRD por la dirigencia nacional, en las cuales obtuvo 4 mil 323 votos, algunos de ellos fraudulentos como los mil 285 que sacó en la casilla de la junta auxiliar de Azumiatla, Puebla. Los perredistas poblanos tienen derecho a otros tres consejeros nacionales, solo que éstos deben ser electos por el Consejo Estatal que desde hace dos meses no se reúne, ni es convocado. ***** La gira proselitista de Francisco Labastida Ochoa por Puebla ya no será el miércoles 25, sino el jueves 26 de agosto. ***** En declaraciones al periódico regional Mundo de Tehuacán, el diputado priísta por ese distrito, Zeferino Romero, afirmó que la línea del gobernador Melquiades Morales en el proceso interno del PRI para elegir candidato a la Presidencia de la República es apoyar a Francisco Labastida. ***** Una trivia: ¿Quién es el influyente personaje que los fines de semana gusta de utilizar el helicóptero del gobierno del estado para viajes de placer a las playas del sureste mexicano? Un tip: el helicóptero en cuestión suele recogerlo los viernes por la tarde en el helipuerto del hotel Aristos de la zona Rosa de la ciudad de México. ¿Adivinó? De cualquier forma, pronto le ampliaré detalles. ***** El coordinador de la fracción priísta de regidores del ayuntamiento de Puebla, César Pérez López, tiene listo un paquetito de casos que el miércoles de esta semana podrían involucrar al regidor panista Fernando López Rojas en un conflicto de tráfico de influencias en favor de empresas como RYCS, constructoras como Mantilla y Asociados y ex funcionarios panistas que aprobaron y gestionaron permisos de uso de suelo para el establecimiento de gasolinerías en la capital del estado. ***** Un grupo de labastidistas poblanos estaría por comprobar en los próximos días un caso de desvío de recursos públicos para la campaña de Manuel Bartlett en su gira por Teziutlán. Por lo pronto el columnista recibió un paquete de fotografías que exhiben al alcalde de Teziutlán, José Sánchez Tinoco, así como al de San José Acateno, junto con varios de sus regidores en actos que violan el reglamento del PRI que rige el proceso de elección de su candidato a la Presidencia de la República. ***** El empresario José Antonio Quintana Fernández nos pide aclarar que jamás se reunió a comer con el ex presidente de la Concanaco, Eduardo García Suárez, por mediación del arzobispo Rosendo Huesca Pacheco, como aquí erróneamente se publicó. ***** Y hasta la prróxima.