Bartlett Díaz, discurso contradictorio tirándole a camaleónico

Ahora que el nombre de Manuel Bartlett Díaz se ha convertido en una referencia obligada para articulistas, columnistas y comentaristas políticos siempre que abordan los temas del cambio en la dirigencia nacional del PRI, los posibles enroques en el gobierno zedillista y la sucesión presidencial del año 2000, el discurso del gobernador del estado me resulta cada vez más contradictorio, si no es que camaleónico.

¿A qué me refiero?

Concretamente a sus declaraciones para deslindarse como posible sucesor de Humberto Roque Villanueva en la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. Bartlett ha dicho, en distintos tonos y ocasiones, que no tiene planes de abandonar la gubernatura de Puebla antes de que concluya su sexenio, en enero de 1999, y menos de arribar en estos momentos a la dirigencia nacional priísta.

En uno de sus últimos deslindes, a propósito de una carta aclaratoria a una nota de Miguel Angel Granados Chapa en el periódico Reforma, Manuel Bartlett expresó que por ahora no está disponible para ir a encabezar al PRI.

Tal afirmación me recuerda otra de don Manuel, en abril de este año, con motivo del ascenso del que fuera su secretario de Gobernación, Mario Marín Torres, a la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI.

En aquella ocasión, con el mismo énfasis con que ahora aclara a Granados Chapa que no está disponible, Manuel Bartlett manifestó que era más importante un cargo en el PRI que la gobernación del estado.

Aunque dicha declaración -que le mereció toda clase de críticas por parte de la oposición, al pretender subordinar las acciones de su gobierno a un virtual triunfo del PRI en las elecciones del 6 de julio- tenía dedicatoria local, no existen motivos para pensar que Bartlett pensara distinto en un contexto nacional. Al menos nunca lo aclaró.

¿Por qué entonces ahora don Manuel nos dice que no está disponible?

En lo personal, creo que por dos razones. La primera es porque don Manuel tiene asuntos pendientes que resolver y amarrar de cara al año 2000, y la segunda es porque a nuestro gobernador más que la presidencia del PRI le interesa la Presidencia de la República. Así de sencillo.

Bartlett Díaz es un político que más que acumular cargos de representación popular o puestos en la administración pública, busca el poder. Así lo ha demostrado y no hay motivos para suponer que en los tiempos por venir vaya a modificar su conducta.

No dudo, como lo afirme en mi entrega del 14 de julio, que la incursión de un hombre como el gobernador poblano a la dirigencia nacional del PRI sería bienvenida por la militancia de ese partido y algunos grupos de poder que tienen puesta la mirada en el año 2000, pero insisto en que Ernesto Zedillo enviaría con ello un pésimo mensaje a quienes hoy le reconocen ser el presidente de la transición a la democracia.

No hay ser brujo o poseer una bola de cristal para adivinar cuáles serían las reacciones de la llegada de Manuel Bartlett al PRI o a la Secretaría de Gobernación, por parte de la prensa internacional y algunos analistas nacionales, los partidos de oposición y las autoridades y agencias norteamericanas dedicadas al combate al narcotráfico.

Por ello sostengo que el gobernador tiene asuntos pendientes que resolver y amarrar, como conseguir el beneplácito del gobierno estadounidense, tarea en la cual trabajan intensamente sus abogados; consolidar su posicionamiento como figura política nacional, a través del llamado sindicato de gobernadores; ganar espacios dentro del PRI y el gabinete, presionando a quien haya que presionar para que él o algunos de los suyos sean incorporados a puestos clave, y mejorar su imagen pública, mediante entrevistas con periodistas nacionales, corresponsales y enviados extranjeros.

Bartlett está metido de lleno en el juego de la sucesión presidencial de Ernesto Zedillo. De ahí su autopromoción, junto con la de Roberto Madrazo Pintado para ir a dirigir al PRI, su regaño a Emilio Chuayffet y a Arturo Núñez por los ``defectos de dirección'' de los diputados y senadores priístas, sus cónclaves con el sindicato de gobernadores en su residencia de la Ciudad de México o en Casa Puebla y sus cada vez más frecuentes encuentros con corresponsales y enviados extranjeros, siendo que él como secretario de Gobernación de Miguel de la Madrid nunca permitió que los gobernadores se reunieran para tratar problemas ajenos a sus entidades o para discutir asuntos nacionales con la prensa extranjera.

Todo ello, insisto, tiene una lógica. Que Manuel Bartlett efectivamente no está disponible por el momento para dirigir al tricolor, lo que no significa que uno de los suyos no lo haga, a sabiendas de que la presidencia del PRI y la Secretaría de Gobernación son relevantes, aunque no tanto, ni juntas siquiera, frente a su verdadera disponibilidad: la Presidencia de la República.

 

INTRAMUROS

            El diferendo que el ayuntamiento de Puebla tiene con el gobierno del estado y la Secretaría de Desarrollo Social es gran medida resultado de un problema mayor: la falta de sensibilidad política del alcalde y algunos de sus colaboradores.

Para Gabriel Hinojosa Rivero no es desconocido el hecho de que a mediados de agosto, la federación había decidido intervenir a su favor para que el gobierno del estado le entregara los casi 22 millones de pesos que le corresponden por concepto del Ramo 26. Que tanto el titular de la Sedeso, Carlos Rojas Gutiérrez, como su delegado en Puebla, Manuel Silva Aguirre, se habían entrevistado con el gobernador Manuel Bartlett y su secretario de Finanzas, Luis Antonio Godina Herrera, para resolver en definitiva el problema.

A Hinojosa le consta que Carlos Rojas había decidido ponerse de su lado, en aquella visita que le hizo a sus oficinas de la Ciudad de México, el lunes 13 de agosto, comprometiéndose a agilizar la autorización de los expedientes técnicos de obra presentados por su ayuntamiento.

Pero se equivocó.

Lejos de agradecer las gestiones de Rojas y su delegado en Puebla, el alcalde escupió al cielo. En la víspera de la visita presidencial a Puebla, el pasado 28 de agosto, se pronunció en declaraciones a la prensa por la desaparición de la Secretaría de Desarrollo Social; es decir, por el despido de Carlos Rojas, que un par de semanas antes había decidido ayudarlo a pesar del gobernador.

Fue entonces que todo cambió. Que Carlos Rojas y Manuel Silva optaron por dejar presionar a las autoridades estatales para que los expedientes técnicos de obra del ayuntamiento fueran liberados, con la sospecha de que quizá lo que se dice en broma es en realidad cierto: que Hinojosa es un presidente municipal que no se deja ayudar.

 

EN CORTO

            Este día, en la casa de retiros La Nueva Esperanza, de la carretera federal México-Puebla, se darán a conocer las conclusiones de los cursos de reingeniería de valores impartidos por Juan Bosco Abascal Carranza al presidente municipal, regidores, directores y jefes de departamento del ayuntamiento de Puebla. Trascendió 20que en dicha reunión, a la cual acudirán alrededor de 120 funcionarios municipales, se delinearán los programas y acciones a seguir por la gestión de Gabriel Hinojosa Rivero en el año y medio que le resta de actuación. ***** Tómelo con reserva, pero nos aseguran que el director de Gobernación Municipal, Jorge Lanzagorta Bonilla prepara ya su salida del ayuntamiento de Puebla y que Mariano Saavedra Muñoz actúa cada vez más como director de Relaciones Interinstitucionales de la Presidencia Municipal que como secretario particular del alcalde, aunque sin dejar de llevar su agenda de actividades. ***** La Dirección Jurídica del ayuntamiento de Puebla, que recientemente pasó a formar parte de la Secretaría General, está en vías de desaparecer o reintegrarse a la Sindicatura, a juzgar por los últimos movimientos. Para empezar se sabe que su actual titular, Alberto Islas González, está por renunciar y que dos de los abogados que aún quedan -Jaime Brito Uriarte y Violeta Lagunes Viveros- fueron ya notificados de que serán reúbicados o liquidados, una vez que en días pasados Jorge Joaquín García Villegas y Lorenzo Fernández de la Fuente (a) ``El Intocable'', fueron enviados como subordinados del Jurídico de la Sindicatura, Luis Molina Lozano. ***** Apuntes de reingeniería en el ayuntamiento de Puebla o el caso de un subordinado que gana más que su jefe. Así podría titularse la historia de la abogada Alejandra Sandoval y López, quien por presiones del coordinador administrativo de la Secretaría General, Víctor González, tuvo que dejar esta dependencia el pasado 15 de agosto, para reúbicarse en el Departamento Jurídico de la Dirección de Desarrollo Urbano, donde su actual jefe, Pablo Aguilar, se encuentra más que inconforme y quizá con justa razón, pues mientras él gana 4,000 pesos mensuales la que se supone es su subordinada gana el doble. Alejandra Sandoval es sobrina de uno de los fundadores del PAN en Puebla, Miguel López y González Pacheco. ***** Dos son las planillas que esta semana buscarán relevar a Adolfo García Vázquez en la presidencia de la asociación de Promotores de Vivienda (Provivac). Una la encabeza Raúl Torres Campillo y la otra el ex presidente del Colegio de Arquitectos de Puebla, José Luis Ramírez Mantilla. ***** Sergio Barrera Alejandre ha comenzado a acumular quejas de constructores por el favoritismo que muestra como director de Obras Públicas del ayuntamiento de Puebla hacia algunas empresas y despachos. Uno de los empresarios constructores más molestos con esta situación y que dice tener pruebas de la corrupción en esta dependencia es Emilio Casco Balcázar, quien incluso ya acudió a denunciar esta situación con miembros de la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional. ***** Una trivia: ¿Qué influyente político ha iniciado la construcción de una residencia allá por el rumbo de la ex hacienda de San José Xilotzingo? Un par de pistas: es priísta y por lo visto muy amigo de los Villa Issa. ***** A propósito, Mario Marín Torres acudió el jueves pasado a una comida de despedida para Humberto Roque Villanueva, quien en los próximos días dejará la presidencia nacional del PRI, una vez que concluyan las comparecencias que los distintos secretarios de Estado tendrán que hacer ante la Cámara de Diputados, para glosar el tercer informe de gobierno de Ernesto Zedillo. El primero en hacerlo será, por cierto, el secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet Chemor, este martes, cuya presencia en el recinto parlamentario podrá arrojar luces acerca de si, como se especula, será removido de su ministerio para ir a ocupar la silla que dejará vacante Roque Villanueva. ***** El coordinador de la diputación panista en el Congreso del estado, José Felipe Puelles Espina, contrajo nupcias este fin de semana. ***** Cuentan que en la reunión de Enrique Doger Guerrero con los directivos y socios del Consejo Coordinador Empresarial de Puebla, el pasado 26 de agosto, el candidato a la rectoría de la Universidad Autónoma de Puebla adelantó que Eduardo Lobato Mendizábal ocupará uno de los principales puestos de su administración. ¿Acaso repetirá como vicerrector de Docencia? ***** Los dogeristas o enriquistas, como ya también se hacen llamar, no deben exagerar su campaña en contra Pedro Hugo Hernández Tejeda, por aquello de sus ligas con destacados ex malpiquistas, pues el tiro podría salirles por la culata, debido a que ellos también tienen lo suyo y nadie les ha dicho nada. Ahí están los casos de José Luis Cardona Ruiz, quien anda organizando reuniones de apoyo a Enrique Doger, junto con Jesús Aroche Ramos, quien hizo lo propio el pasado viernes en la calle Corregidora 810 de San Baltasar Campache, en el salón Arnay, propiedad del no menos célebre Arturo Loyola González. Cardona y Aroche fueron funcionarios malpiquistas y hoy buscan colarse a la campaña de Enrique Doger, haciendo creer a no pocos incautos que forman parte de su primer círculo, lo cual, por supuesto, es falso, sobre todo en el caso del segundo que más que enriquista es simpatizante del tesorero de la UAP, Armando Valerdi Rojas. ***** Fanfarronadas de borracho. Ahora que el próximo 17 de septiembre los candidatos a la rectoría de la UAP acudirán al noticiero de Enrique Montero Ponce para debatir sus programas de trabajo, bien vale traer a colación una anécdota del controvertido conductor de Tribuna. Resulta que en la cena donde festejó sus 10,000 emisiones consecutivas, Montero se fue a brindar a una mesa donde se encontraban dirigentes perredistas, como Eduardo Fuentes de la Fuentes, José Guadalupe Sánchez Jiménez, Rubén Moreno Medina y Luis Ortega Morales, los entonces directores de los institutos de Física, Pedro Hugo Hernández y de Ciencias Sociales, Alfonso Vélez Pliego, y el regidor panista Francisco Fraile García. En la madrugada de aquel sábado 9 de noviembre de 1996, Montero, que para entonces estaba ya muy bebido, convocó a los ahí reunidos a iniciar una campaña en contra de José Doger y en favor de que el próximo gobernador del estado fuera un poblano de Puebla. Ya basta de los abusos del rector y de que vengan los fuereños a gobernarnos, les habría dicho con su habitual voz aguardientosa. El tiempo pasó y hoy Montero Ponce presume a los cuatro vientos no sólo su amistad con Bartlett, de quien aquella noche renegó, sino que gracias a su imparcialidad los universitarios lo escogieron para moderar el debate entre Pedro Hugo Hernández y Enrique Doger. ***** Si entre los directores de unidad académica de la UAP hubo uno que siempre se pronunció porque éstos recibieran al final de su gestión un salario adicional, por los estímulos y becas que no pudieron obtener en su calidad de autoridades administrativas, ese fue precisamente Pedro Hugo Hernández, por lo que hoy llama la atención su discurso impugnando dicha medida que a iniciativa suya impulsó el rector José Doger Corte ante el Consejo Universitario. ***** Finalmente habrá candidato único para la dirección de la Escuela de Enfermería de la UAP, una vez que la Comisión de Auscultación decidió considerar no idónea la precandidatura de María Trinidad Sánchez Rojas, quien en 1985 fue destituida de la dirección de esa unidad por un movimiento estudiantil. Así las cosas, Margarita Campos Vázquez se perfila como la virtual sucesora de Hilda Rosado García en las elecciones del próximo 23 de septiembre. ***** El sábado de hace ocho días, el presidente de la Junta Local de IFE, Marcos Rodríguez del Castillo, fue evaluado por cinco de los seis consejeros locales electorales -el ausente fue Jaime Ornelas Delgado-, con una calificación que a decir de los ahí presentes osciló entre regular y bien, situación que podría hacerlo perder un estímulo económico adicional que otorga el Instituto Federal Electoral a sus mejores funcionarios. ***** Antes de que concluya septiembre, el delegado de la Secretaría de Desarrollo Social, Manuel Silva Aguirre, podría dejar Puebla para ser enviado a otra entidad federativa o las oficinas centrales de la Sedeso en la Ciudad de México. Aunque para sustituirlo figura el nombre del ex senador Germán Sierra Sánchez, también podría haber una sorpresa de última hora. ***** Adiós.