Con motivo de nuestra última entrega, en la que afirmamos que el (¿ex?) vocero de Rafael Cañedo Benítez, Ramón Beltrán López, carecía de autoridad moral para denunciar actos de corrupción por parte de la actual administración municipal, el ex funcionario acusó al periódico y al que esto escribe de no tener pruebas de las irregularidades cometidas por él en su calidad de director de Comunicación Social del ayuntamiento de Puebla durante el trienio 94-96.

Ramón Beltrán se equivoca. Sí tengo pruebas, pero antes de referirme a ellas quisiera traer aquí algunas de sus declaraciones del pasado miércoles, en la que insistió en demandar al presidente municipal Gabriel Hinojosa Rivero dé a conocer la lista de periodistas que cobraban ``embutes'' o ``chayotes'' durante la gestión de Cañedo Benítez.

El ex funcionario admitió en entrevista con el reportero de esta casa editorial, Napoleón Rojas, que no supo de anomalías en la gestión de Rafael Cañedo, pero que si hubiera sabido de ellas tampoco las habría revelado, atendiendo a un acto de fidelidad.

Luego, en el mismo tenor y a pregunta expresa sobre si efectivamente había otorgado ``chayotes'', Beltrán respondió: ``quiero que me lo prueben''.

Ambas afirmaciones son de lo más elocuente y reflejan fielmente la personalidad del (¿ex?) vocero de Rafael Cañedo, porque no dejan lugar dudas sobre su doble discurso y falta de ética política.

Cuando Beltrán tomó posesión como director de Comunicación Social del ayuntamiento de Puebla, seguramente protestó cumplir y hacer cumplir la ley, más allá de sus afectos y fidelidades.

Pues bien, la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del estado de Puebla, cuyo cabal cumplimiento tanto le preocupa, establece en su artículo 50 en sus fracciones I, XX y XXI que todos los servidores públicos deben abstenerse de cualquier acto u omisión que implique abusos o malos manejos.

Así es que si Ramón Beltrán conoció, como seguramente lo hizo, de actos de corrupción durante la gestión de Rafael Cañedo tenía obligación de hacerlos saber a su jefe y de denunciarlos por escrito, sin ninguna demora. No callárserlos por fidelidad o lealtad.

Sobre el asunto de los ``embutes'' o ``chayotes'' que se repartieron a ciertos ``periodistas'' durante la pasada administración municipal, la posición de Beltrán es de lo más cínica.

El (¿ex?) vocero de Rafael Cañedo no niega que éstos se hayan repartido, porque él mismo sabe que es cierto, sino que no existan pruebas para acusarlo legal y oficialmente de que así ocurrió. De ahí su declaración: ``quiero que me lo prueben''.

Obvio es que frente a la imposibilidad de hacerlo, el ayuntamiento de Hinojosa ha tenido que guardar silencio y tragar camote en cantidades industriales. Pero allá ellos.

Lo que Ramón Beltrán no podrá negar es que como funcionario incurrió 20en sendas violaciones a la Ley de Responsabilidades y a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Prestaciones de Servicios del estado de Puebla, como se puede comprobar en el documento que en esta columna se publica.

Me refiero al oficio 21/96, signado por el propio Beltrán, en donde remite con fecha 7 de febrero de 1996, doce facturas para su trámite y pago correspondiente, entre las que sobresalen dos a nombre de Grupo Acir-Puebla, propiedad de su jefe, Rafael Cañedo.

Las facturas número 14330 y 14331, cada una por un importe de 8,050.00 pesos, no debían pagarse ni tramitarse siquiera conforme a las citadas leyes.

No está de más, para información del propio Beltrán -que exigía pruebas- apuntar que el artículo 50 fracción XIII de la Ley de Responsabilidades y el artículo 31 fracción I de la Ley de Adquisiciones, claramente prohibían a él y a Rafael Cañedo contratar publicidad a Grupo Acir-Puebla, por ser propiedad de quien entonces fungía como presidente municipal de Puebla.

Espero que ahora Beltrán no me pida que pruebe que Cañedo es el dueño de Grupo Acir y que tampoco vaya a desconocer la autenticidad del documento que aquí aparece, porque para su información obra en mi poder el original.

 

INTRAMUROS

            En el mayor sigilo posible, el gobierno del estado de Puebla viene efectuando una serie de compras destinadas a los cuerpos de seguridad, que van más allá de uniformes, cascos, chalecos antibalas, vehículos y motocicletas, que de poco o nada sirven cuando los policías tienen como superiores a gentes como Eduardo Barclay Arce, Aniceto Escalante Calderón, Felipe Guzmán Hernández o Humberto Piñon Crespo, que están más preocupados en maquillar y simular cifras sobre mejoras en la seguridad que en combatir realmente la delincuencia.

Ejemplos sobran. Desde oficios como el publicado por EL UNIVERSAL el martes pasado, donde el subdirector operativo de la Policía Preventiva, Humberto Piñón ordena sus oficiales engañar a la ciudadanía con servicios policiacos que jamás se prestan, hasta maratónicas reuniones plenarias de evaluación y seguimiento del Consejo Estatal de Seguridad Pública, donde Eduardo Barclay anuncia millonarias inversiones, innovadoras estrategias contra el hampa y cifras dignas de un cuento de Alicia en el país de las maravillas.

Pero regresemos al asunto que nos ocupa: las compras de material y equipo de seguridad que lleva a cabo el Comité de Adquisiciones del gobierno del estado y que a la fecha rebasan, sólo en vehículos y motocicletas, la suma de ocho millones de pesos.

Lo interesante de estas compras no radica en las camionetas y autos, ni en los uniformes y sofisticados aparatos para descubrir delincuentes en la oscuridad o raterillos mentirosos, sino en el equipo antimotines que el gobierno del estado está por adquirir.

Que a los policías del estado -al mando, por cierto, de jefes militares- se les pretenda dotar de chalecos antibala, binoculares para visión diurna y nocturna, miras telescópicas con poder de ampliación, esposas, bastones y cascos antimotines, parece justo y necesario.

Pero que el gobierno del estado, asesorado por algún general o coronel de los que ahora dirigen las policías, pretenda adquirir tanquetas, es decir vehículos semejantes a un tanque, pero dotados de mayor velocidad y mejor movilidad, resulta no sólo absurdo sino ridículo.

¿Para qué diablos la policía requiere tanquetas? ¿Acaso para reprimir o disolver manifestaciones? ¿O es que Puebla transita hacia la ingobernabilidad? Si no es así, entonces ¿para qué?

 

EN CORTO

            El martes pasado el ayuntamiento de Puebla clausuró el ``Parque Funerario San Ramón'', justo cuando su principal accionista, el regidor Eliseo Pérez Bonilla comenzaba a disfrutar de las prebendas que le heredó la pasada administración municipal gracias a sus buenos oficios como líder vecinal. La historia de cómo Pérez Bonilla se hizo de esta empresa que operaba al margen de la legalidad es una historia de corrupción, tráfico de influencias y complicidades de principio a fin, ya que el panteón -que supuestamente serviría para ayudar a personas de escasos recursos, por lo que el ayuntamiento le condonó el pago de licencias y derechos por más de cien mil pesos- resultó ser un negocio particular del regidor, que no es la primera vez que sorprende a las autoridades y colonos de San Ramón Castillotla con fraudes relacionados con la venta de terrenos y el pago de cuotas de agua potable. Dicho cementario fue clausurado, no por venganza política como el afectado pretende hacer creer, sino por carecer de licencias de construcción y funcionamiento, horno crematorio, cámara refrigerante, capilla de velación y cajones de estacionamiento. Las declaraciones de Pérez Bonilla en el sentido de que el panteón es propiedad de una sociedad anónima, de la cual es socio minoritario, son también una vacilada. Basta echarle un vistazo a la escritura del ``Parque Funerario San Ramón'', contenida en el volumen 114 del instrumento 5,375 de la Notaría Pública Número Cinco de Tehuacán para comprobar que el regidor Eliseo Pérez cuenta con el 40% de las acciones, mientras que sus tres socios -Roberto Galland Sánchez, Eduardo Galland Naredo y Rosa María Con Linares- con el 35, 15 y 10% de las acciones restantes. ***** Una buena noticia: Román Alfredo Gutiérrez Landa, quien actualmente cobra como director jurídico de la Contraloría Municipal, haciendo las veces de escudo protector de su jefe Raúl Barranco Tenorio, renunciará a su cargo antes del 30 de junio para reinscorporarse a su despacho ubicado en la 19 Sur y 33 Poniente. ***** Uno que no se irá del ayuntamiento, sino que será reinstalado, aunque tal vez ya no en el Departamento de Giros Comerciales, es el ex jefe operativo de esa dependencia, Alejandro Colombres, quien fue acusado por algunos de sus subordinados de extorsionar a propietarios de bares y centros nocturnos. ***** El diputado Jorge René Sánchez Juárez se convertirá el próximo sábado 21 de junio en el sucesor de su padre, Constantino Sánchez Romano, en la secretaría general de la FROC-CROC -que para entonces se denominará CROC de Puebla-, ya que no tendrá mayores problemas para vencer a su contendiente Adela Vivanco Mendoza, quien se quedará con la secretaría de trabajo y conflictos. Por cierto, el Comité Ejecutivo de la CROC de Puebla, que actualmente cuenta con 10 secretarías, se ampliará a 12, de las cuales siete serán para gente afín a René Sánchez y las restantes para el grupo de Adela Vivanco, quien mantiene buenas relaciones con la familia de don Constantino Sánchez Romano. Trascendió que después de la elección de René Sánchez y la transformación de la FROC-CROC en CROC de Puebla, el comité nacional de vigilancia de esta confederación pedirá la desaparición de la llamada FROC del Centro que encabeza Luis Sánchez Acosta con el respaldo de Alejandro Paredes Jurado y Heriberto Morales Arroyo, quienes pondrán continuar como asesores sindicales al igual que Constantino Sánchez. ***** Una trivia sindical. ¿Quién es el líder obrero que hace un par de semanas acudió en su flamante Cadillac a una importante agencia automotriz de esta ciudad, no para que le cambiaran la pieza que le estropearon durante un accidente, sino para cambiarlo por uno nuevecito. Un par de pistas: usa una esclava y un anillo que podían calificarse de aparatosos por el oro y diamantes que los adornan. ***** ¿Sabía usted que el gobierno del estado ha pagado ya tres proyectos para saber cómo iluminar el Anillo Periférico sin que hasta la fecha se tenga algún resultado? ¿Acaso esta obra seguirá a oscuras en lo que resta del sexenio? ***** Maximino Bear Sanz es un dirigente empresarial singular. Resulta que es el presidente de la Delegación Puebla de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), siendo que su empresa es textilera (Monejo Textil). Pero eso no es lo más curioso, sino que su fábrica ubicada en el kilómetro 96 de la carretera federal México-Puebla ahora está en renta o por lo menos eso es lo que se puede leer. ¡Vaya líder empresarial! ***** En los 17 días que restan de campaña política, el Partido Acción Nacional concentrará sus esfuerzos en el distrito 06 de Puebla, no se sabe si porque su candidato a la diputación federal, el ex pedemista Carlos Paz Villalba Vivaldo no levanta o porque de plano los panistas están dispuestos a hacer hasta lo imposible por impedir el triunfo del priísta Omar Alvarez Arronte. ***** Otro partido que también hará la propio, pero en el distrito 13 con cabecera en Izúcar de Matamoros, es el de la Revolución Democrática con su candidato Manuel Madero, quien a decir de los mismos perredistas, es el único con posibilidades de triunfo en la entidad poblana. ***** El regidor José Alfredo Jiménez Carriles es el nuevo representante del ayuntamiento de Puebla ante la Asamblea General del Comité de la Feria de Puebla, cuyo presidente, el diputado federal Ricardo Menéndez Haces, pronto podría ser relevado por el que parece su eterno suplente, Máximo Caso Menéndez, de acuerdo con fuentes dignas de crédito. Por cierto, es la hora que Ricardo Menéndez sigue sin covocar al Consejo y a la Asamblea de la Feria de Puebla para informar de sus actividades como presidente, sin que la Secretaría de Desarrollo, Evaluación y Control de la Administración Pública (Sedecap) se tome la molestia de llamarle la atención. ¿No que la ley es pareja para todos? ***** Que tanta confianza tendrán los directivos de la empresa de aviación Aeromar en los informes del Sistema Estatal de Protección Civil y Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder)... que en los próximos días harán con sus propios recursos un estudio sobre la actividad del volcán Popocatépetl, para determinar hasta qué punto las emanaciones de polvo y ceniza ponen en peligro las turbinas de sus aviones. ***** Entre algunos consejeros electorales del Consejo Local del Instituto Federal Electoral existe molestia por la negativa del consejero presidente, Marcos Rodríguez del Castillo, de informarles acerca de cómo se maneja el presupuesto y de las negociaciones que con tal propósito realizó hace apenas unos días con funcionarios de la Secretaría de Finanzas del gobierno del estado. ***** En las tres semanas que los supuestos cuatro precandidatos dogeristas a la rectoría de la Universidad Autónoma de Puebla llevan de visitar las escuelas y facultades de la institución para informar a la comunidad de los acuerdos de Juriquilla, los únicos que no han faltado a uno solo de esos recorridos son el ex jefe de asesores Víctor Espíndola Cabrera y el ex vicerrector de Investigación y Estudios de Postgrado, Enrique Doger Guerrero. ¿Por qué será? Es pregunta, que conste. ***** Hasta el momento los intentos de la rectoría por crear su propia Federación Estudiantil Poblana se han quedado en eso, ya que son muchos los intereses y más lo que pretenden dejar la tropa para convertirse en generales. ***** Y hasta la próxima.