17/Abril/2005
Consultoría Contracorriente

Con una deuda a cuestas que asciende a 1 mil 636.6 millones de pesos, y que equivale a 61% de los pasivos contingentes que posee el gobierno del estado, el Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (Soapap), en términos financieros, está técnicamente quebrado. 

Así se establece en un análisis que, sobre la situación actual del organismo, fue elaborado por Consultoría Contracorriente, en donde se advierte que la deuda pública que arrastra lo está “ahogando”, pues en promedio el 54.9% de su presupuesto total lo destina para el pago de los préstamos que recibió. 

De acuerdo con los datos disponibles a junio de 2004, el Soapap contaba con créditos por 870.9 millones decesos, de los cuales uno corresponde a Banobras, por 87.4 millones de pesos, y dos más del Banco del Bajío, uno por 739.17 millones y otro por 44.38 millones de pesos. 

Y si este panorama parece desolador por sí mismo, se agudiza más cuando se sabe que tales préstamos equivalen a 72% de los ingresos totales de la institución, que son del orden de los 1 mil 217.4 millones de pesos, en tanto que sus ingresos propios apenas alcanzan los 256.6 millones de pesos. 

Esto significa, se establece en el análisis de referencia, que el Soapap no es capaz de generar por sí mismo ni siquiera una cuarta parte de sus ingresos totales. 

Aunado a lo anterior, el Sistema Operador arrastraba al 2003 una cartera vencida de 1 mil 103 millones de pesos, lo que limita su situación presupuestal. 

Ante este panorama, en el mediano plazo el Soapap tendrá que tomar medidas drásticas, que pueden ir desde el aumento de sus tarifas para poder allegarse de mayores recursos, hasta su privatización, aunque en este último caso el gobierno del estado primero tendría que invertir recursos que le permitan ser saneado y del interés de los inversionistas.