Una decena de los capos más buscados en México y el extranjero han sido capturados por autoridades federales en los últimos diez años en el estado de Puebla, quienes hicieron de la entidad su residencia, acompañados por familiares y sus colaboradores más cercanos.
Los detenidos forman parte de cárteles como el de los Beltrán Leyva, de Tijuana, del Golfo, de Sinaloa, y en últimas fechas de la organización delictiva de Los Zetas, como sucedió con el aseguramiento de William de Jesús Torres Solórzano, presunto responsable del trasiego de droga y dinero entre Guatemala y la frontera norte del país.
El primer aseguramiento importante fue el líder del Cártel de Tijuana, Benjamín Arellano Félix, en el año de 2002, y a partir de entonces las detenciones y enfrentamientos entre autoridades y grupos criminales han sido más frecuentes.
Benjamín Arellano Félix
El líder del Cártel de Tijuana fue detenido el sábado 9 de marzo de 2002 por elementos de la XXV Zona Militar en la casa 24 de Villas El Navariego, un conjunto privado y escondido de la colonia Zavaleta, en la zona limítrofe entre Puebla y San Andrés Cholula.
Cerca de ahí, en la residencia 20 del fraccionamiento La Escondida, localizado en el Camino Real a Cholula, su lugarteniente Manuel Martínez, alias la Mojarra, también fue capturado por los soldados.
Sergio Enrique Ruiz Tlapanco, “El Z-44”
El 9 de septiembre de 2009, el Ejército capturó a Ruiz Tlapanco, alias “El Tlapa” o “El Z-44”, presunto fundador de “Los Zetas”.
Tras una persecución y balacera fue detenido en la colonia San Manuel, donde tenía su domicilio. Se le aseguró un arma larga, dos armas cortas, equipos de comunicación y cuatro vehículos de lujo, entre ellos un Porsche y una Hummer.
“El Barbas”
Tras una balacera con policías el 10 de diciembre de 2009, en la junta auxiliar de La Libertad, fueron detenidos cinco presuntos sicarios al mando de Arturo Beltrán Leyva, alias “El Barbas”, quien se escapó durante el enfrentamiento. El saldo fue de un policía municipal muerto y varios lesionados.
Las autoridades les decomisaron 11 rifles AK-47, seis rifles R-15, siete armas cortas, cuatro granadas de fragmentación, 23 proyectiles explosivos de 40 mm, cuatro cargadores de disco de Cuerno de Chivo, 20 cargadores para rifle AK-47, ocho cargadores para rifle R-15, un cargador de disco para rifle R-15, chalecos antibalas, pasamontañas y más de dos mil cartuchos útiles. Además fueron asegurados ocho vehículos, entre estos un Mercedes Benz blindado.
Días después, “El Barbas” fue asesinado en un tiroteo con elementos de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), en la ciudad de Cuernavaca, Morelos.