23/Febrero/2006
Mónica Camacho

Juan Nakad Bayeh es el principal beneficiario de un próspero negocio en el penal de San Miguel. Obtiene la mezclilla a los precios bajos de su amigo Kamel Nacif Borge —que se dedica a la confección de pantalones, chamarras y camisas— y utiliza a los reos del penal como obreros a los que paga a menos de 20 pesos —cuando el salario mínimo es de 45— por jornadas de 10 horas al día.

Aunque ningún interno labora por la fuerza en la maquiladora de “El Intocableâ€, lo cierto es que muchos deben hacerlo para sobrevivir en el Centro de Readaptación Social de Puebla donde las tortillas, el agua y el pan se venden en beneficio del jefe de mantenimiento de la sección de hombres.

Juan Nakad es uno de los personajes centrales de las grabaciones telefónicas interceptadas al “Rey de la Mezclilla†al fungir como su mensajero con la juez que ordenó la aprehensión de la periodista Lydia Cacho Ribeiro —Rosa Celia Pérez González— el coordinador de la Policía Judicial y las autoridades del penal.

Desde que obtuvo la concesión por parte de la Dirección General de Reclusorios y Centros de Readaptación Social en el sexenio de Mariano Piña Olaya, Juan Nakad sostuvo que instaló su maquinaria dentro del penal “en beneficio de los internosâ€.

Desde entonces su concesión se le ha renovado sexenio tras sexenio. Custodios que pidieron el anonimato comentaron que Nakad Bayeh no cubre gastos de servicios básicos como renta, luz y suministro de agua.

La diferencia entre confeccionar ropa dentro del penal y fuera de éste le permite a Naked Bayeh tener una ganancia en la producción de 100%, pues mientras en un parque industrial un pantalón requiere la inversión de 60 pesos, el empresario libanés paga 30 pesos.

En el penal todo tiene un precio
De acuerdo con diversos testimonios recogidos ayer por e-consulta, un trabajador del taller gana entre 80 y 120 pesos a la semana, cuando debe desembolsar más de 30 pesos para comprar una torta y refresco dentro del penal.

Y si desean compartir un momento a solas con su pareja, los presos deberán juntar 200 pesos para entregárselos al encargado de las listas de cuarto de visitas íntimas, Alejandro Rivera, a cambio de la llave de la habitación. También se alquilan reproductores de DVD, televisiones y películas a elección.

El jefe de mantenimiento de la sección de hombres es quien se encarga de vender el agua a los internos en 14 pesos el tonel, por lo que al día obtiene cerca 3 mil 500 pesos de ganancias al comercializar cerca de 4 pipas.

Aunque este medio solicitó entrevista con el director del reclusorio, Heriberto Galindo Martínez para tratar el tema, no existió respuesta por parte de las autoridades del penal.

Los celulares de “El Intocableâ€
A pesar de que los internos ganan apenas una cuarta parte de lo que percibe una maquiladora en el estado, no tienen derecho a prestaciones, ni a organizar una huelga y mucho menos a tomar vacaciones.

Debido a que “El intocable†—nombre con el que lo identifican los internos y custodios del penal— mantiene una buena relación con el director de este Centro de Readaptación, Heriberto Galindo Martínez, así como con el subdirector de Seguridad y Custodia, Raúl Cortero puede ingresar celulares, a pesar de que se encuentra prohibido por el reglamento.

Nakad ya no va al penal
A partir de esta semana a Nakad Bayeh ya no se le observa ingresar al reclusorio en su Grand Marquis gris para supervisar las instalaciones de su taller y saludar a cada uno de los administrativos del penal con su inconfundible acento libanés.

A pesar de que ayer el Consejo Directivo de Centro Libanés celebró su reunión anual para analizar los logros alcanzados en el año, la silla de Nakad Bayeh nunca fue ocupada.

A decir del presidente de la mesa directiva, Sebastián Jacobo Yitani, la vinculación de Juan Nakad y Kamel Nacif con el tráfico de influencias no afectará a la imagen de la asociación porque a pesar de que es una noticia nacional dijo que es un problema entre particulares.

“No tiene nada que ver con nosotrosâ€, sentenció.

Juan Nakad y su poder en el Cereso de San Miguel
Uno de los personajes clave en el entramado que involucra al gobernador Mario Marín Torres y al empresario textil Kamel Nacif Borge, es Juan Nakad Bayeh, concesionario de talleres de maquila al interior del Centro de Readaptación Social (Cereso) de esta ciudad.

Naked figura en dos de las 16 conversaciones telefónicas intervenidas a Nacif Borge, y que inicialmente fueron difundidas por La Jornada; en éstas, ambos personajes de origen libanés intercambian información y opiniones sobre la detención y encarcelamiento de la escritora María Lydia Cacho Ribeiro.

En otra grabación, con un personaje que sólo es identificado por su acento argentino, el “Rey de la Mezclilla†asegura: “Ya le dije a Naked. La pones con las locas y las tortillerasâ€. Ante las risas de su interlocutor, agrega que “¿tú crees que estoy bromeando, eh? Nomás que Juan controla ahí. Ya le fue a decir el director. No te preocupes, aquí, locas y tortilleras. Que aprenda a volver a escribir esta hija de su rechingada madreâ€.

Nakad Bayeh es concesionario de una industria maquiladora al interior del Cereso de San Miguel, en donde se produce mezclilla que posteriormente es vendida para la producción de prendas de vestir.

En medio de este conflicto, el empresario maquilador se convierte en el intermediario de Nacif Borge con personajes clave como la juez que tuvo a su cargo el caso, a quien incluso se le ofrece irse de vacaciones a donde ella elija.

A continuación se reproducen extractos de las versiones estenográficas de las conversaciones dadas a conocer por La Jornada:

Juan Nakad Bayeh (JNB): ¿Qué pasó, patrón?

Kamel Nacif Borge (KNB): ¿Qué pasó, Juanito?

JNB: Oye, estoy aquí en la procu. No pude ver a Alfonso Karam porque está en una rueda de prensa (...) Hablé con la juez. La juez ya está en el juzgado.

KNB: ¿Y qué dice?

JNB: Me dice: 'Juanito, no te me presentas aquí hoy'. Le digo ¿y por qué? Me dice: 'Luego, después te digo'. Parece que le hablaron desde ayer. 'No te quiero ver por acá, no te preocupes, estás en buenas manos'.

KNB: ¿Y qué? ¿Le va a dar fianza?

JNB: No creo. No creo. Ora sí, me dijo que le hablamos al rato. No sé qué orden recibe desde arriba. La otra vez igual... ta' bien, oye, orita te hablo, alcanzo a Alfonso Karam, te hablo en dos minutos, cinco minutos. (Cuelga.)

Acto seguido, la grabación registra el siguiente intercambio:

Dice Hanna, testigo de cargo en contra de Cacho en la demanda que interpuso Nacif:

JNB: Oye, ya está aquí esta mujer. Ya se fue a la chingada.

KNB: ¿Qué, había tanto pedo o puro cuento?

JNB: No tanto, pero... no. Su marido ni madre. Y vino Televisa y toda la cosa y la bajaron donde estaba detenida. Porque por orden del gobernador, le dije, aunque sea cinco minutos, encerrada en una celda. Y la iban a meter ahí, y la bajaron, le tomaron fotos, no sé qué madre. Y ya se fue. Delante de mí habló con López Zavala para decirle que le dice al gobernador que ya esta mujer anda en camino al Cereso, que en cinco minutos llega el Cereso.

KNB: Mmmm.

JNB: Y ya iba yo a ir, pero me dijo la juez que no, que ya luego ella me platica (...) Bueno, ya la trajeron, ya la chantajearon. Dicen que está deshecha. Porque dice que la trajeron en una carcacha. Le dije, es a propósito, que le mandaron en un coche viejo. Que en 24 horas que estuvo con ellos le dan de comer una vez. Vamos a ver qué pasa.

Conversación con un hombre de acento argentino
KNB: Mañana va a haber un escándalo hijo de puta nacional.

—¿Eso puede ayudar a Succar, Kamel?

KNB: Bueno, pues por lo pronto ¿no dijo la hija de la chingada que yo hacía fiestas?

—Sí, claro, hija de puta.

KNB: ¿Y que tenía yo 100 denuncias de acoso sexual? A ver, hija de tu chingada madre, ¿dónde hay una?

—Ahora págale a una mujer en la cárcel para que la viole.

KNB: No, no, no. Si ya está recomendada.

—Ah, qué lindo.

KNB: Con las locas y las tortilleras. Sale bajo fianza, ¿eh? Pero la sujetó al proceso.

—¿Y la van a traer a Puebla?

KNB: Claro, la mandé allá. Les dije, la traen a la hija de —ya la agarraron a las 12 del día—, les dije la traen en carro, a la hija de puta. Esposada. Si quiere mear, que se mee.

—Incroiable... (Increíble).

KNB: Dicen que la venganza es una sopa que se toma fría, no caliente, caballero.

—Como el gazpacho.

KNB: Ya le dije a Naked. La pones con las locas y las tortilleras.

KNB: Tú crees que estoy bromeando, ¿eh? Nomás que Juan controla ahí. Ya le fue a decir el director. No te preocupes, aquí, locas y tortilleras. Que aprenda a volver a escribir esta hija de su rechingada madre.

<b>Otra conversación con Juan Naked Bayeh</b>
KNB: ¿Qué la juez se va a culear y darle p'atrás?

JNB: No, mira, yo estuve con la juez hoy (...) Me dijo Adolfo que no cree que se raja la juez, porque es contra su decisión. Yo lo único que le dije a Valentín: no se meta en la vida de la juez, a la juez le vale madre, la juez va a ser sobre derecho. Pero si le ordenan desde el tribunal, porque le culean ellos, entonces no puede decir no, ¿me entiendes?

KNB: ¿Sabes por qué no puede retractarse? Porque quedan como pendejos.

JNB: Así es. Otra cosa que ella me dijo (es) que el día sábado estuvieron hablando, le hablaron 30 veces, échale fuera, pa'fuera como sea. Ella le puso 104 mil pesos. No, qué, 140 mil. Lo que ajusten, 5, 10, 14. Ella dijo: 'no se puede menos'. La única cosa, que le bajó 30. Y le bajó 30 y pagó 70 en efectivo. Cuando la fui a ver el lunes me dijo 'Juan, tengo aquí el dinero que sacaron la bola de pendejos que fueron a defenderla. Que vaciaron las cajas y sacaron todo y pusieron 70 mil en efectivo'. Y me dijo, 'Juan, para mí es auto de formal prisión'.

KNB: ¡Claro!

JNB: Pero yo sé cómo es su vida. Se meten mucho con ella. Pobre mujer, tenía que estar de vacaciones (...)

KNB: Dile que yo la mando de vacaciones.

JNB: Por eso te digo. Se queda trabajando toda la semana, porque el sábado también va a trabajar. Ella es hermano de nosotros mil veces.

KNB: ¿Adónde va ir de vacaciones? Dile que yo la mando. Dile que adonde quiera.

JNB: Yo le digo. (…)