17/Febrero/2006
Eduardo González

El gobernador Mario Marín Torres aseguró ante presidentes municipales, empresarios, dirigentes sociales, funcionarios públicos y electorales, que tiene “la cara limpia y la conciencia tranquila”, en alusión a su presunta participación en el arresto y encarcelamiento de Lydia Cacho Ribeiro.

Al encabezar el acto previo a la entrada en vigor —este viernes 17 de febrero— de la Ley de Acceso a la Información en el estado de Puebla, el mandatario inició así su discurso:

“Muchas personas pensaron que no vendría a esta reunión. Estoy aquí por dos razones: primero porque tengo la cara limpia y la conciencia tranquila, no tengo nada de qué avergonzarme.”

Marín Torres consideró que la entrada en vigor de la Ley de Transparencia marcará un nuevo rumbo de la entidad, y reiteró que su presencia en el acto no fue casual ni de rutina, en cambio demostró que tienen la “plena convicción” y voluntad de que la justicia en el estado sea una “bella realidad y no una fantasía”.

Indicó que los actos de corrupción y falta de transparencia en el gobierno no permiten que se fortalezca la confianza entre el estado y la sociedad, por lo que su administración dio “pasos muy firmes” para combatir irregularidades y propiciar la honestidad del servidor público mediante la creación de la Fiscalía Anticorrupción y la publicación de un Código de Ética.

“Nunca más el gobierno volverá a ser un tabú para la sociedad. Como abogado conozco los deberes y derechos de los servidores públicos y la sociedad. El gobierno es depositario de las leyes y el patrimonio social. Las épocas del oscurantismo gubernamental deben quedar atrás para siempre”, asentó.

Marín Torres hizo llamado a la unidad y la integración poblana, encontrar puntos de coincidencia en trabajo y pidió a los presentes que “nada ni nadie nos divida, que nada ni nadie detenga el progreso de Puebla, respetar la ley nos conviene a todos”.

Durante el evento, Juan Pablo Guerrero Amparán, comisionado del Instituto Federal de Acceso a la Información, sostuvo que el momento que atraviesa el gobierno estatal es una excelente oportunidad para demostrar que aplica una total política de transparencia y ofrecer elementos para legitimarse ante la ciudadanía.

Pidió a los comisionados estatales “luchar a muerte” por su autonomía frente al estado, resistir a las presiones a las que se verán sujetos, y renunciar a seguir agendas políticas.

A su vez, Roberto Díaz Sáenz, presidente de la Comisión para el Acceso a la Información Pública de Puebla, aseguró que la sociedad puede confiar que las decisiones que tome el organismo se sustentarán en la autonomía de gestión que les dio el Congreso del estado.