29/Marzo/2006
Javier Puga Martínez

“Está mal la nota, la conversación fue editada, truqueada. Totalmente falsa y amañada”. De esta forma, el vocero estatal Valentín Meneses descalificó la nota que ayer publicó el diario Excélsior donde asegura que aún editada, la conversación entre Mario Marín y Kamel Nacif es real y nunca tuvo modificaciones de fondo. 

Irritado y por momentos desesperado por aclararle a reporteros la postura oficial sobre este asunto, para el vocero del gobierno del estado el peritaje de Repetto Music y certificado por el estadounidense Howard Mattern es totalmente válido por lo que enviarán una aclaratoria a ese medio.

Ayer por la mañana, el diario <i>Excélsior</i> publicó una nota donde señala que Howard E. Mattern, dueño de la compañía Mattern’s Video Productions, no tiene idea de quiénes son Marín y Nacif, y que en el análisis de la grabación sólo halló evidencias de dos voces.

Localizado telefónicamente en California, Estados Unidos, Mattern explicó a la reportera de ese medio, Ana Vega, que el ruido de fondo es consistente a lo largo de la grabación, lo que significa que no pudo haber sido editada con audios de diferentes conversaciones.

Es decir, el perito indicó que la grabación difundida por W radio en la ciudad de México, sólo puede formar parte de una plática más larga y sufrió algunos cortes. Dijo también que la pieza tiene un mismo origen y no hay evidencias de que se hayan insertado palabras.

Mattern, quien tiene 26 años de experiencia en peritaje y producción de audio y video, no quiso revelar el pago que recibió por el servicio ni quién lo realizó.

Al respecto, Meneses Rojas sostuvo que “está mal esa nota, mandaremos una carta aclaratoria porque no concuerda con la realidad, tenemos otras entrevistas, con Sergio Sarmiento que entrevistó a Howard y le dio la versión y corroboró su dictamen sobre la certificación que es una conversación editada, se pusieron palabras, se pusieron palabras. Es una conversación totalmente truqueada, manipulada”.

En conferencia de prensa en Casa Aguayo, Meneses Rojas desmintió al contralor Víctor Manuel Sánchez Ruiz —quien ayer dijo que el peritaje no le costó un peso al gobierno estatal— y confirmó que fueron 80 mil pesos más IVA los pagados a José Luis Repetto por el análisis de la grabación, más 500 dólares pagados a Mattern por la certificación del estudio de Repetto Music.

Defendió el hecho de que la campaña para limpiar la imagen del gobernador se pague con dinero público, porque es algo que atañe “a la institución estatal”.

“No es a título personal, si fuera una cuestión de divorcio entonces seguramente sí (Mario Marín) tendría que pagar, pero en este momento es una cuestión que atañe a la institución, al gobierno del estado, al gobernador del estado. Desde luego que la dirección de Comunicación Social del estado pagará”.

A más de cuarenta días de iniciado el escándalo Cacho-Marín, Valentín Meneses dijo que se sigue preparando la denuncia contra quien resulte responsable de manipular la conversación con Kamel Nacif “que tanto daño ha hecho a Puebla”, pero eso será hasta que se tengan todos los elementos necesarios para poder presentarla.