12/Abril/2006
Javier Puga Martínez

El presidente municipal Enrique Doger y el gobernador Mario Marín acordaron la realización de un paquete de obras en la capital por más de mil millones de pesos, así como apoyo total de la administración estatal al 475 aniversario de la ciudad, durante una reunión privada que sostuvieron este miércoles en Casa Puebla.

“Es un paquete amplio incluyendo obra conjunta, incluyendo los puentes que se están realizando, los hospitales, como la ampliación del Periférico, el pago de la Policía Estatal que está prestada al municipio, fácil son más de mil millones de pesos. Yo creo que será al 50 por ciento pero lo detallaremos el próximo miércoles”, informó el secretario de Gobernación, Javier López Zavala.

Después de casi dos meses de señalamientos de la comuna contra funcionarios estatales, tanto el edil como el secretario de Gobernación sustentaron después del encuentro que el tema de Lydia Cacho quedó superado.

Cabe recordar que cinco días después de iniciado el audioescándalo Mario Marín-Kamel Nacif, el alcalde Enrique Doger dijo que se estaba ponía en riesgo la gobernabilidad del estado, por lo que pidió a la administración marinista tener una postura mesurada y prudente ante el “conflicto que dañaba a la entidad”.

Luego, el alcalde difundió una serie de críticas en la prensa que tensaron las relaciones entre ambos niveles de gobierno, al punto que Mario Marín y Enrique Doger evitaron eventos oficiales donde pudiera darse un encuentro entre ambos.

El punto más difícil de esta ruptura se dio cuando el secretario de Gobernación, Javier López Zavala, pidió la renuncia de Enrique Doger a la presidencia municipal de Puebla por sus declaraciones contra el gobierno del estado, según reveló el propio Doger.

Después de versiones de supuestos encuentros entre Doger y Marín, finalmente este miércoles ambos gobernantes se reunieron en privado por cerca de una hora en Casa Puebla.

En conferencia de prensa a la misma hora, pero por separado, Enrique Doger en Palacio Municipal y Javier López Zavala en Casa Aguayo, coincidieron en señalar que la reunión fue “completamente positiva”.

También coincidieron en decir que en ningún momento se trató el tema de las declaraciones del alcalde, ni el escándalo político, ni tampoco hubo disculpas por los comentarios y acciones vertidas por ambos lados.

López Zavala rechazó que el gobierno del estado haya amedrentado al presidente municipal: “de mi parte no hubo ninguna declaración en contra, simplemente decirles que no hubo ni amenazas de nuestra parte, tampoco hubo cuentas, tampoco estuvo ese tema en nuestra agenda y la agenda del gobierno fue en otro sentido, la misma que ratificamos el día de hoy de trabajo y de esfuerzo conjunto y hoy lo ratificamos con todos los poblanos”.

Por su parte, Doger Guerrero se comprometió a suspender sus críticas y hasta rechazó que haya orquestado una campaña de desprestigio contra el protector de Kamel Nacif Borge.

“No hay ni enfrentamiento ni confrontación, lo que hay es un propósito de trabajo. Si en ocasiones anteriores hemos expresado con toda responsabilidad nuestros puntos de vista, es eso, pero en ningún momento se busca ni confrontación ni división, eso le ha hecho mucho daño a los poblanos, además, los electores quieren trabajo conjunto más allá de simpatías o antipatías, sino simplemente poner por delante el interés de Puebla y en eso puedo señalar que el gobernador y su servidor estamos en esa disposición”.

Javier López Zavala dijo que el alcalde Doger no propuso al gobernador utilizar fondos del Impuesto sobre Nómina para la rehabilitación del Centro Histórico, pero sí habrá inversión en obra pública así como apoyo total a las actividades del 475 aniversario de la fundación de Puebla —a celebrarse el próximo domingo 16 de abril— y demás proyectos conjuntos.

A la reunión de los gobernantes en Casa Puebla acudieron el secretario de Gobernación Javier López Zavala y el subsecretario de Egresos, David Villa Issa.