Los préstamos a funcionarios por cantidades mayores a su sueldo; una partida de 515 millones de pesos al regidor David Díaz García así como una gratificación por 200 mil pesos y un jetta al ex contralor Rubén Reyes Leyva, fueron acciones que autorizó directamente el presidente municipal Luis Paredes Moctezuma, sostuvo el vocero de la comuna Miguel Ángel Labastida Carballeda.
El vocero confirmó que se realizaron préstamos a funcionarios de primer nivel a pesar de contradecir la política de la Tesorería respecto a que los préstamos al personal no pueden rebasar su sueldo de un mes, solo en caso de emergencia, pues fue el propio alcalde el que autorizó dichos préstamos.
Labastida Carballeda defendió la medida argumentando que en cualquier gobierno o empresa se tiene esa prestación y garantizó que todas las deudas serán saldadas a más tardar en diciembre de este año.
En el caso de Alberto Pérez Peña, director de Comunicación Social, y Maximino Bear, coordinador de Macroproyectos, quienes recibieron 83 mil 315 pesos, el vocero dijo que pagarán intereses, aunque no supo especificar cuánto y abundó que el préstamo se hizo para que adquirieran camionetas, pues a pesar de que en un principio se dijo que se beneficiarían con el paquete de 92 Jettas que autorizó el Cabildo, decidieron renunciar a éste y solicitar un préstamo mayor para adquirir camionetas.
A pesar de que en mayo del 2002 el tesorero aseguró ante los medios de comunicación que en el caso de los Jettas el 50% del costo lo absorbería la comuna y el resto los beneficiados, el vocero contradijo a Arturo Botello, pues sostuvo que serán los funcionarios quienes cubrirán el pago total de los vehículos.
Durante la conferencia de prensa, Miguel Ángel Labastida trató de minimizar los préstamos por un millón 76 mil pesos que se hicieron a funcionarios de primer y segundo nivel, argumentando que de la gestión marinista hay una deuda por 262 mil pesos.
Se le preguntó por qué intentaba minimizar los hechos con la deuda de la gestión marinista cuando el Cabildo autorizó que ésta se etiquetara como incobrable en la sesión del 29 de enero y la Contraloría no ha iniciado ningún proceso al respecto, a lo que el vocero respondió que sí se abrió un expediente, el cual no supo detallar en contra de quién es ni en qué fase se encuentra.
Cuando se le solicitó que diera los nombres de los funcionarios de la actual administración que solicitaron préstamo, comenzó a leer los de los deudores de la gestión de Marín, al insistirle, dijo que era una lista grande y que no la tenía a la mano “además ya la tiene Intolerancia”, dijo.
Ya empapado en sudor, el vocero reiteró que a diferencia del gobierno de Marín, el de Luis Paredes no dejará deuda alguna, pues el tesorero Arturo Botello tiene experiencia en el ramo, ya que de la gestión de Gabriel Hinojosa no dejó ningún pendiente.
Al preguntarle por qué el regidor David Díaz García tiene por comprobar 515 mil pesos ante el Órgano de Fiscalización Superior, cuando en su calidad de regidor no maneja presupuesto alguno, el vocero respondió que por autorización directa del alcalde se le entregó tal monto al panista, sin embargo no supo aclarar en qué se utilizó.
Respecto a la liquidación por 200 mil pesos que se entregó al contralor Rubén Reyes Leyva, el vocero explicó que se trata de una gratificación que el también el propio alcalde autorizó.
Cuando se le inquirió si el alcalde no estaba haciendo uso discrecional de sus facultades para aprobar la salida de recursos del erario público, el vocero sostuvo que tiene facultad para tomar decisiones discrecionales al igual que el ejecutivo y el federal, por lo que no se violenta la ley.