08/Septiembre/2004
Claudia Lemuz

El priísta Alfredo Rivera Espinosa rindió protesta ayer como presidente del Comité Directivo Municipal de Puebla y se comprometió a que con su trabajo y el apoyo de las bases, tanto Enrique Doger Guerrero como Mario Marín Torres, candidatos del PRI a la alcaldía y la gubernatura, obtendrán el triunfo en la capital.

Previo a que Blanca Alcalá Ruiz presentara su informe de actividades y más tarde su renuncia, los asistentes al acto que se llevó a cabo en las instalaciones del PRI municipal, ubicado en el centro de esta ciudad, apoyaron con porras su permanencia.

La insistencia de algunos priístas porque Blanca Alcalá se quedara al frente del comité municipal fue contrarrestada con porras de simpatizantes de Alfredo Rivera, quienes terminaron por sofocar el entusiasmo de los seguidores de la próxima funcionaria del gobierno estatal.

En el acto, al que asistieron los líderes de los sectores y los candidatos a diputados por los cuatros distritos con cabecera en la capital poblana, los discursos emitidos hicieron constante hincapié en la unidad del partido y del trabajo conjunto que realizarán Enrique Doger y Mario Marín.

Rivera Espinosa advirtió: “Basta de simulación, no hay pretextos ni habrá culpables, que le quede claro a la oposición, todos los priístas vamos en el mismo barco y llevamos el mismo rumbo, la victoria”.

Por su parte, el presidente del Comité Directivo Estatal, Mario Montero Serrano destacó que la candidatura de Enrique Doger, presentada al principio como ciudadana, ahora es priísta, porque Doger Guerrero se acercó a las bases del partido y a la militancia, lo que lo convierte en un verdadero priísta que tendrá una victoria segura.

Por su parte, Blanca Alcalá destacó que cumplió con la tarea encomendada al fortalecer y ampliar la base de militantes que el PRI tiene en la capital, gracias al acercamiento directo con las personas, que fueron olvidadas por líderes del pasado.

Ante las pasiones que generan las contiendas políticas tanto internas como las constitucionales, acudí a la prudencia y la mesura con el claro propósito de contribuir a una política inteligente y civilizada, manifestó.

“Dejo esta dirigencia con la satisfacción de haber cumplido con la tarea que se me asignó”, dijo segura, pero con la voz a punto de quebrársele.

En entrevista previa, Mario Montero y Enrique Doger rechazaron que la llegada de Alfredo Rivera sea una estrategia para suavizar las diferencias que existen entre marinistas y dogeristas, ambos comentaron que solo forma parte de cerrar un ciclo que Blanca Alcalá, a quien reconocieron por su trabajo al frente del Comité Municipal del PRI.