En septiembre hubo gran expectativa por la resoluci贸n que tendr铆a que emitir la CNDH sobre el caso Chalchihuapan. Las organizaciones civiles advirtieron que el gobernador Rafael Moreno Valle tendr铆a que aceptar la recomendaci贸n o ser铆a sujeto a juicio pol铆tico.
El 11 de septiembre, la CNDH determin贸 que fue un proyectil de largo alcance, disparado por granaderos o escopeteros, el que hiri贸 de muerte al ni帽o Jos茅 Luis Tehuatlie el 9 de julio, durante el desalojo de habitantes de San Bernardino Chalchihuapan.
A煤n no terminaban los reclamos y cr铆ticas por la tragedia de Chalchihuapan, cuando el gobierno poblano ya se hab铆a echado encima otra vez a la poblaci贸n. Propuso construir un parque tem谩tico a un lado de la pir谩mide de Cholula y para conseguir sus prop贸sitos coordin贸 con los ayuntamientos la expropiaci贸n de predios.
De nuevo se reaviv贸 la protesta y los pobladores salieron a las calles a manifestar su rechazo al proyecto y acusaron al gobierno de intentar arrebatarles sus terrenos.
En el terreno nacional, el presidente Enrique Pe帽a Nieto present贸 su segundo informe de gobierno. Presumi贸 sus reformas hacendaria, educativa y energ茅tica, y pint贸 un panorama de bienestar al alcance de la mano.
Pe帽a Nieto anunci贸 la construcci贸n de un nuevo aeropuerto, que ser铆a la obra emblem谩tica de su sexenio. Los observadores se帽alaron que al presidente se le olvid贸 tratar el tema de la corrupci贸n.
El 26 de septiembre en Iguala, Guerrero, un grupo de estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa que viajaba en un autob煤s fue interceptado por elementos del orden cuando se dirig铆an a buscar m谩s veh铆culos, para dirigirse despu茅s a la conmemoraci贸n de la matanza de Tlatelolco.
En un primer choque, los polic铆as dispararon y asesinaron a seis personas y lesionaron a 27 estudiantes. Luego se llevaron a los muchachos detenidos y 43 personas fueron reportadas desaparecidas.
Los reclamos de las organizaciones de derechos humanos por los asesinatos y desapariciones fueron aumentando hasta trascender las fronteras. El alcalde de Iguala, Jos茅 Luis Abarca y su esposa, a quienes se les consider贸 los autores intelectuales del asesinato y desaparici贸n de los 43 estudiantes, se dieron a la fuga. M谩s tarde, el enojo de las organizaciones civiles se concentr贸 en exigir la renuncia de Pe帽a Nieto.
